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Tomografía coherencia óptica
OCT
Se trata de una técnica rápida, no invasiva, de gran resolución, que no requiere de dilatación pupilar. Actualmente se considera una herramienta fundamental en el diagnóstico y manejo de múltiples patologías oculares.
Angio – OCT
Se utiliza para el diagnóstico y seguimiento de múltiples patologías retinales como: retinopatía diabética, degeneración macular relacionada con la edad, coroideopatía central serosa, oclusiones vasculares, telangiectasia macular y membrana neovascular coroidea de diversas causas.
Topografía corneal
Esta prueba hace una representación completa de toda la superficie corneal, midiendo las variaciones de la curvatura de la misma.
La información que brinda la topografía es determinante para casos como:
– Medición para la implantación de lentes intraoculares en pacientes con catarata.
– Logra mejor adaptación de lentes de contacto.
– Diagnóstico y seguimiento de patologías degenerativas de la córnea.
– Evaluación en pacientes candidatos a cirugía refractiva. (miopía, hipermetropía o astigmatismo).
Forma en que se realiza
La topografía corneal debe ser realizada sobre una córnea en “reposo”, por lo tanto, es esencial no usar lentes de contacto durante algunos días previos a la realización del estudio y abundante lubricación.
Preparación
El paciente debe lubricar sus ojos con lágrimas durante 10 días antes del estudio (cuatro veces por día). Además, no debe usar lentes de contacto los días previos al estudio. Para lentes de contacto blandas, un mínimo de 7 días y para lentes flexibles no menos de 15-20 días.
Biometría láser / Aladdin
La biometría láser en oftalmología es una técnica avanzada que utiliza la tecnología láser para obtener mediciones precisas de diferentes estructuras oculares, especialmente del ojo humano, con el objetivo de planificar y realizar procedimientos quirúrgicos oftalmológicos, como la cirugía de cataratas o la implantación de lentes intraoculares (LIO) de manera más precisa.
La biometría láser se utiliza para medir varios parámetros del ojo, incluyendo: – Longitud axial del ojo: Es crucial para calcular el poder de la LIO que se va a implantar durante la cirugía de cataratas o corrección de la visión. – Curvatura corneal: Se mide para determinar la forma y la potencia refractiva de la córnea, lo que es esencial para determinar la lente intraocular apropiada. – Profundidad de la cámara anterior: Es importante para evaluar el espacio disponible para la colocación de la LIO y prevenir posibles complicaciones durante la cirugía. – Diámetro de la pupila: Puede ser relevante en ciertos procedimientos, como la cirugía de corrección de la visión láser, para obtener resultados óptimos.
El procedimiento de biometría láser implica el uso de dispositivos especializados que emiten haces de luz láser para tomar medidas precisas de estas estructuras oculares. La tecnología láser permite mediciones rápidas, no invasivas y altamente precisas, lo que ayuda a los oftalmólogos a personalizar y adaptar mejor los tratamientos y procedimientos quirúrgicos a las características únicas del ojo de cada paciente.
Los resultados obtenidos a través de la biometría láser son fundamentales en la planificación preoperatoria para determinar el tipo y la potencia de la lente intraocular que se utilizará en cirugías de cataratas o en procedimientos de corrección de la visión. La precisión de estas mediciones contribuye significativamente a mejorar los resultados visuales y a reducir la probabilidad de errores refractivos después de la cirugía.
En resumen, la biometría láser en oftalmología desempeña un papel crucial al proporcionar mediciones precisas de las estructuras oculares, lo que permite una planificación más precisa y personalizada de los procedimientos quirúrgicos oftalmológicos, mejorando así los resultados visuales para los pacientes.
Campimetría computada
La campimetría computarizada es una prueba oftalmológica utilizada para evaluar el campo visual de una persona. Esta prueba mide la capacidad de una persona para ver objetos en su entorno periférico mientras se fija la mirada en un punto central.
El objetivo principal de la campimetría computarizada es detectar anomalías en el campo visual que podrían indicar enfermedades o lesiones en áreas específicas del sistema visual, como el nervio óptico o la retina. Se utiliza en el diagnóstico y seguimiento de condiciones oculares y neurológicas que afectan el campo visual, tales como: – Glaucoma: El glaucoma es una enfermedad ocular en la que el daño progresivo al nervio óptico puede causar pérdida gradual del campo visual, generalmente comenzando en la periferia. La campimetría computarizada es útil para monitorear cambios en el campo visual y detectar signos tempranos de glaucoma. – Lesiones del nervio óptico: Traumatismos, inflamaciones, tumores o enfermedades que afectan el nervio óptico pueden causar pérdida de visión en áreas específicas del campo visual, y la campimetría computarizada puede ayudar a identificar estas áreas afectadas. – Enfermedades neurológicas: Trastornos que afectan el sistema nervioso central, como los accidentes cerebrovasculares, tumores cerebrales o enfermedades degenerativas como la esclerosis múltiple, pueden causar defectos en el campo visual, y la campimetría es útil para evaluar estos cambios.
El proceso de la campimetría computarizada implica que el paciente se siente frente a un instrumento llamado campímetro automatizado. Durante la prueba, se le pide al paciente que fije la vista en un punto central y responda a la aparición de luces o estímulos visuales en diferentes partes del campo visual periférico. El paciente presiona un botón cada vez que detecta una luz o un estímulo visual.
El campímetro registra las respuestas del paciente y crea un mapa visual que muestra las áreas de visión reducida o pérdida. Esta información ayuda al oftalmólogo o al médico a evaluar la salud ocular y el funcionamiento del sistema visual, permitiendo el diagnóstico temprano y el monitoreo de la progresión de enfermedades que afectan el campo visual.
La campimetría computarizada es una herramienta importante en la evaluación de la función visual y ayuda a los profesionales de la salud a determinar el curso de tratamiento más adecuado para el paciente en función de los resultados obtenidos.
Biometría ultrasónica / Ecometría ocular
Para qué se realiza
En función de la medición de diversos parámetros anatómicos oculares, como largo axil, curvatura corneal y profundidad de cámara anterior, estima, mediante fórmulas matemáticas, la potencia de la lente intraocular a colocar en la cirugía de catarata.
Forma en que se realiza
Se realiza con el paciente acostado en la camilla y con los ojos cerrados. Se aplica gel soluble sobre el párpado superior y se coloca el transductor respectivo sobre el párpado. Es un estudio oftalmológico no invasivo donde se coloca anestesia tópica (en gotas).
Preparación
No se requiere preparación.
Paquimetría
Para qué se realiza
La paquimetría es una exploración fácil, rápida e indolora que se realiza para medir el espesor corneal. Tiene diferentes aplicaciones, tales como la exploración complementaria en el glaucoma, para decidir una posible cirugía refractiva o incluso para el diagnóstico y seguimiento de ciertas enfermedades corneales.
En relación con el glaucoma, debemos tener en cuenta que el espesor corneal está conectado con la medida de la presión intraocular, de modo que espesores corneales que estén por arriba o por debajo de la media pueden dar lecturas sesgadas en los dispositivos de medición de la presión que deberán ser corregidas.
En cuanto a la cirugía refractiva (LASIK o PRK), la paquimetría es una de las exploraciones para decidir si una persona puede operarse con láser para el tratamiento de su miopía, hipermetropía o astigmatismo, ya que en la cirugía se va a sustraer cierta cantidad de tejido que afectará directamente al espesor corneal. Por tanto, la córnea debe ser lo suficientemente gruesa para corregir un determinado número de dioptrías.
Además, se utiliza en el diagnóstico de ciertas patologías en las que se genera un adelgazamiento corneal como en el caso del queratocono, o bien en las que se produce un engrosamiento como es el caso del edema corneal.
Forma en que se realiza
La onda ultrasónica es reflejada por la cara posterior de la córnea (como un eco) para retornar hacia el transductor, el que a su vez traduce la onda en electricidad, para ser devuelta al microprocesador; el que calcula el tiempo que demora la onda desde su emisión hasta su captación. El tiempo medido es traducido a distancia, lo que determina el grosor de la córnea (en micrones, 1cm=100 micrones).
Preparación
El paciente debe suspender los lentes de contacto 10 días antes del turno.
Ecografía ocular
Es un procedimiento ecosonográfico que permite detectar patologías dentro de la cavidad ocular y órbita del paciente.
Para qué se realiza
Se utiliza para detectar opacidades corneales o cataratas, desprendimientos de la retina o del vítreo, hemorragias vítreas o hemovítreos, alteraciones del cristalino, presencia de cuerpos extraños y tumoraciones oculares.
Forma en que se realiza
El paciente se debe acostar en la camilla y cerrar los ojos. Se aplica gel soluble sobre el párpado superior y se coloca el transductor respectivo lineal de alta frecuencia sobre cada párpado para realizar el estudio de cada uno de los ojos.
Preparación
No usar maquillaje el día del estudio.
Autorefractometría computada (ARM)
Para qué se realiza
Es un estudio computarizado que permite determinar en forma objetiva el vicio refractivo de ojo, ya sea miopía, hipermetropía o astigmatismo.
Forma en que se realiza
Puede durar entre 10 y 30 segundos y brinda al especialista una aproximación del defecto visual del paciente.
Preparación
No se requiere preparación, en el caso que utilice lentes de contacto debe retirarlos en el momento.
Tonometría
Consiste en la medida indirecta de la presión intraocular, (PIO) mediante el uso de un tonómetro. La presión intraocular es la presión ejercida por los líquidos contenidos en el interior del globo ocular (humor vítreo y humor acuoso) sobre las estructuras firmes del ojo.
Para qué se realiza
El estudio de la presión intraocular es una técnica sencilla y segura que permite detectar un aumento de las cifras de la presión dentro del globo ocular así como realizar un seguimiento de las mismas.
Una elevación mantenida o muy brusca de las cifras de presión intraocular puede dar lugar a daños irreversibles del nervio óptico que pueden traducirse en una pérdida de visión parcial o completa. La tonometría es un estudio utilizado como ayuda al diagnóstico y al seguimiento de enfermedades en los ojos como el glaucoma.
Las cifras de presión intraocular y las cifras de presión arterial son independientes.
Forma en que se realiza
La tonometría de aplanamiento, de contacto o de Goldmann consiste en la medida indirecta de la presión intraocular mediante el empleo de un tonómetro colocado en una lámpara de hendidura. Es el método más comúnmente utilizado. En la tonometría de aplanamiento el especialista coloca una gota anestésica en cada ojo y utiliza colorante de fluoresceína durante el estudio.
La tonometría de no contacto o con aire se basa en la utilización de un chorro de aire para aplanar la córnea y así, medir la presión intraocular.
Preparación
El paciente no debe estar usando lentes de contacto ya que este estudio requiere el uso de fluoresceína, la cual puede arruinarlos.
Test de visión cromática (Farnsworth, Roth o similar)
El test de visión cromática de Farnsworth, también conocido como prueba de Farnsworth-Munsell 100 Hue, es una evaluación oftalmológica utilizada para medir la percepción del color y detectar deficiencias en la visión cromática, específicamente en la capacidad para distinguir entre diferentes tonalidades y matices de colores.
Para qué se realiza
El test de Farnsworth-Munsell 100 Hue se utiliza para evaluar la habilidad del paciente para ordenar una serie de 85 cartas de colores en un orden cromático específico. Estas cartas consisten en una gama de tonos de colores dispuestos en un orden aleatorio, y el paciente debe organizarlos en un espectro continuo de colores que va desde un extremo (por ejemplo, rojo) hasta el otro extremo (por ejemplo, azul).
Durante la prueba, el paciente clasifica los colores colocando las cartas en secuencia según su percepción de los matices cromáticos, organizándolos de manera progresiva y coherente. El objetivo es determinar la capacidad del individuo para discriminar entre diferentes tonos y sombras de colores, así como identificar posibles deficiencias en la percepción cromática.
Esta prueba es útil para detectar diferentes tipos de anomalías en la visión del color, como la protanopía (deficiencia para percibir colores en el extremo rojo del espectro), la deuteranopía (dificultad para distinguir colores en el rango verde), la tritanopía (problemas en la percepción de los colores azules), así como también para detectar otras anomalías más sutiles en la percepción cromática.
El test de Farnsworth-Munsell 100 Hue es utilizado por oftalmólogos, optometristas y profesionales de la visión para evaluar y diagnosticar deficiencias en la percepción del color. Además, puede ser útil en situaciones donde se requiera una precisión en la percepción del color, como en campos laborales donde la identificación precisa de colores sea esencial, como en el diseño gráfico, la industria textil, la pintura, entre otros.
Este test proporciona información valiosa sobre la capacidad del paciente para percibir y diferenciar los colores y puede ayudar a determinar estrategias de corrección o adaptación para mejorar la calidad de vida de aquellos que presenten deficiencias en la percepción cromática.
Test de ojo seco (Schirmer, Rosa de Bengala, BUT)
El test de ojo seco es un conjunto de pruebas oftalmológicas diseñadas para evaluar la presencia y la gravedad del síndrome del ojo seco. Esta condición ocurre cuando hay una falta de lubricación adecuada y humectación en la superficie del ojo, lo que puede causar síntomas como sequedad, irritación, enrojecimiento, sensación de cuerpo extraño, visión borrosa y molestias al parpadear.
Métodos de diagnóstico
Existen varios métodos y pruebas utilizados para diagnosticar el ojo seco, que pueden incluir: – Prueba de Schirmer: Mide la cantidad de lágrimas producidas por los ojos en un determinado período de tiempo. Se realiza colocando pequeños papeles de filtro en los párpados inferiores para medir la cantidad de humedad que se absorbe durante un período específico. – Tinción con fluoresceína: Se utiliza para evaluar la superficie ocular en busca de áreas dañadas o secas. Se aplica una solución de fluoresceína (un tinte) en el ojo y luego se observa con una luz especial para detectar daños en la capa de células que recubre el ojo. – Prueba de ruptura del film lagrimal (BUT): Esta prueba mide el tiempo que tarda en romperse la película lagrimal normalmente estable en la superficie ocular. Se coloca una pequeña cantidad de colorante en el ojo y se observa cuánto tiempo tarda en aparecer la primera área seca en la película lagrimal. – Evaluación de los signos y síntomas: El médico también puede realizar un cuestionario para evaluar los síntomas del paciente y realizar un examen físico para observar signos como enrojecimiento, inflamación, sequedad y otros indicadores de ojo seco.
Para qué se realiza
El objetivo del test de ojo seco es determinar si hay insuficiencia en la producción de lágrimas o problemas en la calidad de las lágrimas, así como evaluar el daño en la superficie ocular. Esto ayuda al médico oftalmólogo u optometrista a diagnosticar el ojo seco y determinar la mejor forma de tratamiento, que puede incluir el uso de lágrimas artificiales, cambios en el estilo de vida, tratamientos con medicamentos y, en algunos casos, procedimientos o cirugías específicas para abordar la causa subyacente del ojo seco.
Test de sensibilidad de contraste
El test de sensibilidad de contraste es una prueba oftalmológica utilizada para evaluar la capacidad de distinguir entre objetos que tienen diferentes niveles de contraste, es decir, la capacidad de percibir diferencias sutiles en los niveles de luminosidad entre áreas adyacentes.
Para qué se realiza
Este tipo de prueba es importante para evaluar la función visual, ya que la sensibilidad al contraste es crucial en situaciones de baja iluminación o condiciones de luz cambiante. Además, puede ayudar a detectar problemas visuales que pueden no ser evidentes con una simple evaluación de la agudeza visual.
Durante el test de sensibilidad de contraste, el paciente puede ser presentado con diferentes patrones o imágenes en blanco y negro, o con escalas de grises, donde las áreas de contraste son variadas. Estos patrones pueden ser líneas, letras, números o imágenes que tienen niveles variables de contraste entre el fondo y el objeto en cuestión.
El objetivo es determinar la menor cantidad de contraste que un paciente puede discernir o distinguir con precisión en una serie de pruebas visuales. Se evalúa la capacidad para ver y diferenciar patrones o detalles con niveles de contraste cada vez más sutiles.
El test de sensibilidad de contraste es útil en varias áreas de la oftalmología y la optometría, incluyendo: – Evaluación de enfermedades oculares: Puede ayudar a detectar problemas oculares como cataratas, glaucoma, degeneración macular u otras enfermedades de la retina que pueden afectar la sensibilidad al contraste. – Monitoreo de la función visual: Es útil en la evaluación del funcionamiento visual en condiciones de poca luz o en entornos con contrastes variables. – Evaluación de la calidad visual: Puede proporcionar información sobre la calidad de la visión en términos de la capacidad de discernir detalles finos y contrastes, lo que puede afectar la percepción del entorno y la calidad de vida del paciente.
El test de sensibilidad de contraste se realiza en el consultorio del oftalmólogo o el optometrista, y los resultados obtenidos pueden ayudar a los profesionales de la salud visual a comprender mejor las capacidades visuales de un paciente y diseñar planes de tratamiento o prescribir dispositivos ópticos que mejoren la visión en situaciones donde la sensibilidad al contraste es crucial.
Curva diaria de presión ocular
La curva diaria de presión ocular se refiere al patrón de cambios en la presión intraocular a lo largo del día. Esta curva muestra las fluctuaciones naturales que ocurren en la presión dentro del ojo durante un período de 24 horas, y puede variar significativamente de una persona a otra.
La presión intraocular es la presión del fluido dentro del ojo, y se mide en milímetros de mercurio (mmHg). Normalmente, la presión ocular tiende a ser más baja por la mañana y aumenta ligeramente durante el día, alcanzando su punto máximo en la tarde o noche. Este patrón es parte de la variabilidad diurna fisiológica de la presión intraocular.
Cuál es la utilidad
La curva diaria de presión ocular es útil en oftalmología por varias razones: – Diagnóstico y monitoreo del glaucoma: En el glaucoma, una enfermedad ocular en la que el daño al nervio óptico está relacionado con un aumento de la presión intraocular, el monitoreo de las variaciones diarias en la presión ocular puede ser fundamental. Puede ayudar a identificar picos de presión que podrían ser perjudiciales para el nervio óptico y permitir a los médicos evaluar la efectividad del tratamiento. – Ajuste del tratamiento: En pacientes con glaucoma u otras afecciones oculares que afectan la presión intraocular, la información sobre la curva diaria de presión ocular puede guiar el ajuste del tratamiento. Puede influir en la selección de medicamentos, horarios de administración o la necesidad de intervenciones adicionales para controlar la presión ocular. – Evaluación de la efectividad del tratamiento: El seguimiento regular de la curva diaria de presión ocular permite evaluar la efectividad de las intervenciones terapéuticas en la gestión de la presión intraocular. Si la presión no está controlada adecuadamente a pesar del tratamiento, puede ser necesario modificar la estrategia terapéutica.
Cómo se realiza
La medición de la presión intraocular a lo largo del día generalmente se lleva a cabo en un entorno clínico bajo la supervisión de un oftalmólogo. Puede realizarse a través de dispositivos portátiles especializados que miden la presión intraocular en momentos específicos durante un período prolongado de tiempo, permitiendo así la creación de una curva diaria de presión ocular.
Esta información es valiosa para el seguimiento y tratamiento de enfermedades oculares, especialmente el glaucoma, donde el control de la presión intraocular es crucial para preservar la salud visual y la integridad del nervio óptico.